La infección urinaria, también conocida como infección del aparato urinario, es causada por bacterias que migran a la vejiga y a los riñones de una persona. Estas bacterias son comunes en las regiones genital y anal. A pesar de ser mucho más frecuente en mujeres, por una razón anatómica, la infección urinaria también afecta al hombre, principalmente si alguna enfermedad de próstata estuviera correlacionada¹^,². Algunos factores de riesgo están asociados con la infección urinaria: morbilidades como diabetes, menopausia, pacientes con historial de cálculo renal, alteraciones en la próstata, historial de procedimientos urológicos y uso reciente de sonda vesical². Hay también mayor o menor susceptibilidad a infecciones de acuerdo con cada individuo, especialmente en mujeres, relacionadas a la flora vaginal, uso frecuente de antibióticos, características genéticas, tamaño da uretra, entre otros^3,4.

Cuando las bacterias afectan solo a la vejiga, la infección lleva el nombre de cistitis. En este caso, los principales síntomas son dolor al orinar y en la parte inferior del abdomen y urgencia miccional (aumento de la frecuencia de ir al baño para orinar). Si la infección evoluciona afectando también a los riñones (pielonefritis), la tendencia es el agravamiento del cuadro. En este caso, los síntomas son acompañados de fiebre alta, escalofríos y dolor lumbar¹.

Al percibir las señales es importante buscar ayuda médica, ya que la automedicación, sin conocimiento de cuál bacteria la puede haber causado a infección, puede ser perjudicial¹. Por medio de exámenes de orina, entre ellos el urocultivo (examen que define el diagnóstico) y antibiograma, el profesional sabrá cuál es la bacteria que provocó la infección y cuál el antibiótico a recetar. En los casos de pielonefritis, el médico también puede solicitar un examen de imagen, como una tomografía, una ecografía o una resonancia magnética².

Es posible tomar algunos cuidados preventivos para evitar la infección urinaria que valen tanto para hombres, como para mujeres^1,2:

• Evite usar duchas vaginales;
• Cuando usa el baño, limpie la zona en sentido de adelante hacia atrás;
• Lave bien sus manos después de usar el baño;
• Beba mucha agua a diario;
• Vaya al baño siempre que sienta ganas. No retenga la orina.

En estos dos últimos casos, con la ingesta de más agua y la ida al baño con más frecuencia, se evita que la bacteria permanezca en el organismo. Otro consejo importante: trate de orinar después de una relación sexual, ya que la orina puede ayudar a eliminar las posibles bacterias que entraron durante el acto¹.

 

Fuentes: 1- Infecção Urinária: Tratamento, sintomas e fatores de risco – Ministério da Saúde. Último acesso em 10 de agosto de 2020. 2- Infecção urinária. Sociedade Brasileira de Nefrologia. Último acesso em 10 de agosto de 2020. 3- Heilberg IP ET Al. Abordagem Diagnóstica e Terapêutica na Infecção do Trato Urinário - ITU. Rev Assoc Med Bras 2003; 49(1): 109-16. 4- Cabeço ALB, Colombo TE. Bactérias causadoras de infecções urinárias e seu perfil de resistência aos antimicrobianos. Health Sci Inst. 2019;37(2):113-8